Por fin se le había quitado el «pause» a las decisiones, a las vitas de todos, porque al final del camino, cada uno necesitaba continuar con su camino, por mucho que las ausencias dolieran. Así que las decisiones estaban tomadas.
Volver a esa casa siempre causaba el mismo dolor, el mismo miedo, el temor de lo nuevo, de lo desconocido, de una nueva vida sin ell@s, pero de alguna u otra manera, era (tristemente) la herencia que los abuelos habían dejado, una casa en la que se partieron pasteles, piñatas y roscas de reyes, una casa en la que se veía el box, cada viernes, a las 11 de la noche, habitaciones donde se velaron los sueños de los nietos, las ansias de los hijos, una mesa en la que se compartieron almuerzos de medio día y cenas de despedida.
Era el lugar al que cada uno podría regresar en caso de que tuviera algún problema, el lugar que siempre mantenía puertas abiertas, flores de Lirio y el cantar de los pájaros, es por eso que decidieron que no podían deshacerse de ella, no aún, no en un tiempo; que harían durante un año el intento de reunirlos a todos (hijos), para que así, entre todos pudieran ser participes del destino del regalo de los abuelos.
D.R. © Angeles LuCa 2017
Imagen de Pixabay
Qué hermoso tu texto, tan apropiado para estos días. Me encanta eso de ser el lugar al cual puedes regresar. Un beso
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Gracias Belita. Así debería de ser. Un beso 😊🌺
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Herencia de humanidad y sentimientos esculpidos en cada visita. Recuerdos, algunos, borrosos; impregnados de voces familiares y aromas inconfundibles.
Estación de llegada para algunos y de salida para otros pero, para todos, punto de encuentro y refugio seguro.
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Me ha encantado 💗 gracias 😊🌺
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A ti por publicar 🙂
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No, no, no, no… a ti por leer 😀 Un abrazo y excelente día.
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Vale, queda repartido 🙂
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¡Hermoso! No llegué a conocer a mis abuelos, pero como decía en un escrito de hace casi treinta años: “Conocí a mi abuelo Francisco en el color de los ojos de mi madre…” ¡Gracias por escribir! 🙂 🙂
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Gracias por leer 😊 Los abuelos son algo hermoso.
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¡Qué fuerte Angeles! No me importa confesarte que solo con ver esa entrañable imagen y tu texto me he puesto a llorar como una niña, el recuerdo de mis padres fallecidos ambos hace poco más de 1 año duele y seguirá doliendo pero me reconforta llorar, no te preocupes.
Un abrazo
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Llorar libera el alma, yo he llorado al escribirlo también. Pero mantener los recuerdos de las personas que amamos nos mantiene fuertes. Te mando un fuerte abrazo. 😊🌺
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Cierto! y me siento arropada al oírte decir esto.
Un fuerte abrazo también para ti💜
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